imo noveno cumpleaños, un accidente que atrae un sinfín de cambios. El más notorio: dejar la Tierra y llegar al Segundo Cielo. El más difícil de aceptar: someterse al ser que la salvó de morir. Entre tanta obstinación y malas decisiones, tanto Niamh como el arcángel deben prepararse para el acostumbrado juicio ante las Jerarquías del Segundo Cielo. Él orgulloso y ella obstinada, él dominante y ella rebelde, dos polos opuestos que a medida que pasan los días se empiezan a atraer. La curiosidad de él envuelve a Niamh y la máxima ley de los Siete Cielos amenaza con ser quebrantada. La obediencia va de la mano con el pecado y la mentira se abraza con la verdad. Eso el arcángel lo sabe muy bien.