Cabe destacar que, a lo largo de la historia, ha habido personas innovadoras que han estado al frente de los cambios. El problema es que a menudo no reconocemos quiénes son esas personas hasta mucho más tarde. La retrospección nos proporciona una visión clara y sin obstáculos de quiénes fueron los impulsores y los agitadores, pero en el presente, podemos estar tan distraídos por todo lo que está sucediendo -las diversas personas y salidas que compiten por nuestra atención- que nos perdemos los cambios de juego.
Los que la historia tiende a recordar son los que están en la vanguardia de su campo, los que llevan a la humanidad más lejos de lo que ha estado antes, ampliando nuestros límites y redefiniendo lo que significa vivir como un ser humano. Desde la Dra. Marie Curie hasta Thomas Edison, aquellos que exploraban y empujaban los límites del mundo son los que terminamos recordando.
Ahora más que nunca, en nuestro mundo tecnológicamente avanzado y dependiente, aquellos que innovan y exploran nuevas avenidas de tecnología y ciencia y cómo pueden afectar nuestra vida diaria son las personas a las que debemos seguir. No solo observar, sino emular. Su éxito puede ser nuestro éxito, si prestamos atención a sus métodos y sus principios.
Una de esas personas es Elon Musk.